Piel seca y deshidratada: Qué es, cómo diferenciar y tratarla

Se caracteriza por la falta de lípidos en la superficie de la piel, también conocida como barrera cutánea. La función de la barrera lipídica es retener la hidratación y proteger la piel de las agresiones externas como el frío, el viento o la contaminación. Cuando esta barrera se ve comprometida, la piel pierde agua con mayor facilidad y aparecen síntomas como la tirantez, la aspereza, la descamación o el picor.

Diversos factores pueden causar o empeorar la sequedad cutánea, entre ellos:

• Factores genéticos: Algunas personas tienen predisposición genética a tener la piel seca.


• Edad: Con el paso del tiempo, la piel produce menos lípidos naturalmente, lo que la vuelve más propensa a la sequedad.


• Factores climáticos: El frío, el viento, la baja humedad ambiental y la exposición solar pueden resecar la piel.


• Hábitos de higiene: El uso de jabones agresivos, duchas o baños muy calientes y la falta de hidratación pueden dañar la barrera de la piel.


• Ciertas enfermedades: Algunas enfermedades como la dermatitis atópica o la psoriasis pueden cursar con sequedad cutánea.

Si tienes la piel seca, significa que tu piel no produce suficientes lípidos o grasas para ayudar a mantener una barrera cutánea saludable. Esto provoca una pérdida excesiva de agua y la consecuente deshidratación.

La piel deshidratada puede afectar a cualquier tipo de piel, incluso a la piel grasa. Se produce cuando la piel pierde más agua de la que recibe, provocando un desequilibrio hídrico. Algunos signos visibles son:

• Sensación de tirantez: Especialmente después de la limpieza facial.


• Aspecto opaco y sin brillo: La piel luce apagada y sin vida.


• Líneas de expresión más marcadas: La deshidratación acentúa las arrugas y líneas de expresión.


• Pérdida de elasticidad: La piel se siente menos flexible y puede presentar descamación.

La piel seca y la piel deshidratada son dos condiciones cutáneas que a menudo se confunden, pero que tienen causas y tratamientos diferentes. La piel seca es un tipo de piel que carece de componentes grasos, mientras que la piel deshidratada es una condición temporal causada por la falta de agua en la piel.

Algunos alimentos pueden contribuir a la deshidratación de la piel, entre ellos:

• Alimentos ricos en sal: La sal promueve la retención de líquidos, lo que puede deshidratar la piel.


• Alcohol: El alcohol tiene un efecto diurético, es decir, aumenta la producción de orina y la eliminación de líquidos.


• Cafeína: Al igual que el alcohol, la cafeína en exceso puede contribuir a la deshidratación.

¿Qué vitamina me falta si tengo la piel muy seca?

La vitamina E juega un papel crucial en la salud de la piel. Es un potente antioxidante que protege la piel del daño de los radicales libres, responsables del envejecimiento prematuro. Además, la vitamina E ayuda a fortalecer la barrera cutánea, previniendo la pérdida de hidratación.

¿Qué fruta hidrata la piel?

La sandía es una fruta rica en agua y electrolitos, lo que la convierte en un excelente hidratante natural. Además, aporta vitaminas A y C, esenciales para la producción de colágeno y la protección antioxidante.

Si tu piel es seca, es fundamental seguir una rutina de cuidado de la piel específica:

• Limpieza suave: Utiliza limpiadores o leches limpiadoras que no resequen la piel.


• Hidratación diaria: Aplica una crema hidratante rica en lípidos por la mañana y por la noche.


• Exfoliación semanal: Elimina las células muertas con un exfoliante suave para favorecer la absorción de los productos hidratantes.


• Protección solar: Aplica protector solar a diario, incluso en días nublados para protegerte de los rayos UV.

Beber suficiente agua a lo largo del día es fundamental para mantener la piel hidratada desde el interior. Se recomienda beber entre 1,5 y 2 litros de agua al día.

Además del agua, puedes optar por:

• Infusiones: La manzanilla, la tila o el té verde son excelentes opciones.


• Agua con frutas: Añade rodajas de limón, pepino o naranja al agua para darle un toque de sabor y aumentar su poder hidratante.


• Caldos: Los caldos de verduras son ricos en electrolitos y minerales.

Bebe mucha agua y consume alimentos ricos en electrolitos. En tu rutina de skincare, limpia tu rostro con un limpiador suave y sin jabón, seguido de una crema hidratante rica en ingredientes humectantes como el ácido hialurónico y emolientes que retengan la hidratación como la manteca de karité. No olvides aplicar protector solar a diario, ya que el sol puede resecar aún más tu piel.

Para combatir la resequedad, necesitas una crema que no solo hidrate, sino que también fortifique la barrera protectora de tu piel:

Vichy Minéral 89 100H: Crema con ácido hialurónico

Nuestra recomendación es Vichy Minéral 89 100H Moisture Boosting, una crema hidratante con una fórmula única que combina ácido hialurónico, Agua Volcánica de Vichy con millones de minerales, vitamina B3, vitamina E y escualano. Esta poderosa combinación hidrata intensamente tu piel hasta por 100 horas, refuerza la barrera cutánea, la protege de las agresiones externas y la oxidación celular.

Recuerda que cada piel es única y lo más importante es escuchar sus necesidades. Si la sequedad persiste o presentas molestias, te recomendamos consultar con un dermatólogo para que te entregue un diagnóstico y tratamiento personalizado. ¡Date el cuidado que te mereces y luce sana, hidratada y radiante con los productos para la piel Vichy!